Recibe charrería nacional certificado ante la Unesco

La Jornada

CDMX.- Representantes de diversas comunidades charras del país recibieron este jueves el certificado de inscripción ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), que consolida a “la charrería, tradición encuestre de México” como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

En la ceremonia efectuada en el Auditorio Jaime Torres Bodet en el Museo Nacional de Antropología (MNA), participaron Jorge Gutiérrez Vázquez, subsecretario de desarrollo cultural y fomento a la lectura de la Secretaría de Cultura, (representante del presidente Enrique Peña Nieto), Alma Lara, oficial de administración en Unesco México, (quien suplió a Nuria Sanz, representante de la oficina en México de Unesco), Gabriel Cabello Martínez, presidente del consejo directivo del Conservatorio Nacional de la Charrería, Myriam Vachez Plagno, secretaria de cultura en Jalisco, Luis Javier Campuzano Piña, director general para la Organización de las Naciones Unidas de la Secretaría de Relaciones Exteriores, y Arturo Jiménez Mangas, presidente del consejo directivo de la Asociación Nacional de Charros.

“A nombre de todos los charros y charras del país quisiera enviar un enorme abrazo a todas las comunidades de los estados de Chiapas, Oaxaca, Tabasco, Veracruz, que han resultado afectadas por los recientes sismos y por el huracán Katia.

En este día tan especial para nosotros en el que celebramos el Día del Charro, es necesario recalcar que gracias al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y la UNESCO, logramos rescatar en 2016 el rumbo de nuestra tradición, ya que se obtuvo el expediente que permitió que la charrería fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, gracias a los funcionarios Francisco López Morales, y Edaly Quiroz, muchas gracias de verdad”, indicó Manuel Basurto García Rojas, vicepresidente del Conservatorio Nacional de la Charrería.

Jorge Gutiérrez Vázquez, subsecretario de desarrollo cultural y fomento a la lectura de la Secretaría de Cultura, entregó a Arturo Jiménez Mangas, presidente del consejo directivo de la Asociación Nacional de Charros, Leonardo Dávila Salinas, representante de la Federación Mexicana de Charrería, Pedro Rocha, vicepresidente para los Estados Unidos de Norteamérica de la Federación Mexicana de Charrería, Pedro Martínez, integrante de la Asociación Charros de Jalisco, José Luis Díaz, del Papaloapan Oaxaca, José de Jesús, de Morelia, Joaquín Valenzuela, de san juan del Río Querétaro, Juan de Dios, de La Tuna Alta Jalisco, Javier Basoto, del estado de México, José Lugo, de Huichapan, las reproducciones facsimilares del certificado de inscripción de la charrería a la lista de la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Uno de los documentos más importantes que integran el expediente oficial presentado a la UNESCO es el plan de Salvaguardia, elaborado por la comunidad portadora, representada por socios de la Asociación Nacional de Charros junto con representantes de la comunidad artesanal y el respaldo de los gobiernos de Jalisco, estado de México y ciudad de México.

El plan de Salvaguardia incluye medidas como la creación de un Conservatorio de la Charrería, conformado por diversas instancias gubernamentales, académicas y de la sociedad civil, como las secretarías de Cultura, Educación Pública, los institutos de Investigaciones históricas, estéticas así como las que realizan la Universidad Nacional Autónoma de México; el INAH, la Federación Mexicana de Charrería, el Instituto Nacional de Bellas Artes, el Instituto Mexicano de la Juventud y el Instituto Mexicano para la mujer.

La inscripción de la Charrería ante la UNESCO permitirá una mayor difusión de los objetivos de la convención, así como la vinculación de los valores que promueve con el Patrimonio Cultural Inmaterial en general y se garantizará su transmisión a las siguientes generaciones, al permitir la creación de nuevos espacios para la práctica de la charrería a nivel individual o colectivo.

Actualmente, la charrería se realiza en México a través de casi 2 mil eventos anuales en los que participan alrededor de mil asociaciones charras. Su práctica se ha difundido en Estados Unidos, donde se encuentran 184 comunidades charras distribuidas en: Arizona, California, Colorado, Idaho, Illinois, Kansas, Nebraska, Nevada, Nuevo México, Oklahom, Oregon, Texas y Washington.