Prevé FMI contracción de economía mexicana en 2025

Redacción

El Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó drásticamente sus previsiones de crecimiento para la economía mundial, y colocó a México como la única nación con proyección negativa para 2025, al anticipar una contracción de 0.3 por ciento en su Producto Interno Bruto (PIB).

La nueva estimación representa un giro en la evaluación del organismo, que en su informe previo proyectaba un crecimiento de 1.4 por ciento para el país. Para 2026 también se redujo el pronóstico de expansión económica mexicana, de 2 por ciento a 1.4 por ciento anual.

El ajuste ocurre en un contexto de tensiones comerciales globales, luego de que el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara aranceles universales y tasas más altas —aún suspendidas— para prácticamente todos los socios comerciales. Según el FMI, los aranceles actuales son los más altos en los últimos 100 años.

“El sistema económico global que ha funcionado durante los últimos 80 años está entrando en una nueva era”, advirtió Pierre-Olivier Gourinchas, economista jefe del FMI, al presentar la actualización del informe Perspectivas de la Economía Mundial, basada en datos hasta el 4 de abril.

En el documento, el Fondo advirtió que una mayor escalada de las tensiones comerciales y la incertidumbre respecto a las políticas económicas de las principales potencias podrían desacelerar aún más la actividad global.

A nivel mundial, el FMI redujo su estimación de crecimiento económico para 2025 de 3.3 a 2.8 por ciento, y para 2026 de 3.3 a 3 por ciento. También advirtió que la inflación disminuirá más lentamente de lo previsto, con tasas estimadas de 4.3 por ciento en 2025 y 3.6 por ciento en 2026.

Tras darse a conocer el informe, la Presidenta Claudia Sheinbaum desestimó la previsión del Fondo respecto a una contracción en la economía mexicana. Aseguró que el Gobierno Federal cuenta con un plan para fortalecer el desempeño económico del país, aunque no dio detalles.

El FMI advirtió que el escenario actual es “extraordinariamente fluido” y reconoció que sus proyecciones podrían cambiar si las condiciones económicas o comerciales continúan deteriorándose.