¿Las matemáticas nos sirven para nuestra vida diaria?

No podemos negar que, para muchas personas, los inicios en el mundo de las matemáticas fueron un enorme desafío. Por eso, cuanto más complejo se volvía el aprendizaje de esta rama básica de la enseñanza, más nos preguntamos: “Y esto, ¿para qué nos sirve?”

Si bien puede tratarse de una inquietud asociada a estar atravesando una etapa de traspaso de lo concreto a lo abstracto, o, simplemente, una expresión de rebeldía, es válida. La cultura general requiere saber de todo un poco, pero ¿cuánto ayudan las matemáticas?

Para responder esta pregunta, repasamos algunos aspectos claves de nuestra vida diaria en que necesitamos involucrar estos conocimientos.

Mediciones

Una de las áreas más cuestionadas de las matemáticas es la geometría y, por eso, más de uno se preguntó si realmente necesitamos saber cómo se saca el área de un triángulo. A decir verdad, se trata de una información clave al fragmentar un terreno para siembra o fabricar un mueble.

Las distancias, por ejemplo, son útiles para programar un viaje y saber cuánta gasolina necesitaremos, con ayuda de los cálculos de proporcionalidad. Incluso, conocer las unidades de medida y sacar proporciones es clave a la hora de cocinar.

Gestiones

A medida que ganamos autonomía, aumenta la cantidad de gestiones que debemos resolver con nuestros conocimientos matemáticos. Ir al cajero automático, realizar compras, pagar cuentas y racionar nuestros insumos son solo algunos ejemplos.

Esto vuelve imprescindible el aprendizaje de las operaciones a una edad temprana, ya que los niños pueden familiarizarse con actividades vitales. Frente a la falta de herramientas de apoyo, podemos repasar matemáticas online con Tutorela, una plataforma de estudio muy completa.

Comprensión de información

Otro aspecto en nuestra vida cotidiana que sostenemos con nuestras herramientas matemáticas es la recepción y comprensión de los distintos tipos de información. Ya sea que leamos una liquidación de sueldo o un estudio médico, es importante tener recursos para su interpretación.

En términos menos específicos, podemos leer estadísticas en la TV o revisar el pronóstico extendido, dos acciones imposibles de sortear sin haber aprendido algunos conceptos. Estos nos ayudan a desenvolvernos en todo tipo de gestiones sin dificultad.

Desarrollo intelectual

Fuera de las gestiones, acciones y mediciones concretas, el estudio de las matemáticas se instala como área de aprendizaje básica por otra razón clave: el desarrollo intelectual. Ocurre que el paso al nivel de abstracción que conlleva nos permite desarrollar nuestro pensamiento lógico.

Constantemente nos vemos expuestos a información de todo tipo y la asimilamos en la medida en que realizamos conexiones y completamos conocimientos previos. En este ejercicio involucramos procesos que aprendemos en el análisis matemático.

Ejercitación mental

Por último, es importante destacar el rol fundamental de las matemáticas en la ejercitación mental, que es clave para nuestra vitalidad y desarrollo continuo. No es casual que los ejercicios matemáticos sean parte de programas para la tercera edad.

Esta labor de incluir las matemáticas desde los inicios de nuestro desarrollo intelectual hasta la ancianidad, responde a la valoración de esta área educativa como espacio vital.