Redacción
Aguascalientes, Ags.-A través de este medio, la Universidad Autónoma de Aguascalientes manifiesta su extrañamiento
por las infundadas, arteras y lamentables declaraciones emitidas por el Colegio de Arquitectos,
publicadas el día 25 de agosto del año en curso.
Aunque es del conocimiento de todos, queremos reiterar aquí algunos hechos indispensables
para comprender por qué las acusaciones que se nos han hecho con respecto a los procesos de
contratación de obra carecen de sustento y se revelan como un grave acto de irresponsabilidad
por parte del cuerpo colegiado:
- La actual administración de la UAA ha cumplido a cabalidad, en cada ejercicio fiscal y en
todas sus periodicidades con los procesos de rendición de cuentas que interna y
externamente se le han requerido. - Todos los programas presupuestales de la UAA son auditados, tanto por la Auditoría
Superior de la Federación, como por el Órgano Superior de Fiscalización y el Órgano
Interno de Control. - Todos los estados financieros de esta casa de estudios son dictaminados por un
Despacho Certificado por la Secretaría de la Función Pública y designado por el máximo
Órgano de Gobierno de la Universidad. - Se ha atendido en tiempo y forma cada una de las solitudes de acceso a la información,
además de cumplir con la difusión de la información general y especifica aplicable en la
Plataforma Nacional de Transparencia. - Más allá de las obligaciones legales con las que nuestra institución cumple, por iniciativa
propia, la UAA estableció un apartado en su página de transparencia institucional
denominado “Transparencia proactiva”, donde brinda toda la información generada en
en materia de contrataciones —tanto de adquisiciones, como de servicios y de obra
pública—. En lo referente a la obra pública, desde aquí se difunden tanto los planes
anuales de obra, como cada uno de los documentos oficiales que dejan evidencia de la
trazabilidad de las etapas de contratación. - La UAA ha asumido siempre como premisa la trasparencia proactiva y una rendición de
cuentas profunda, razón por la cual siempre ha implementado, en los tiempos
correspondientes, las recomendaciones de mejores prácticas y/o normativas solicitadas
a todos los Entes Públicos en el Marco del Sistema Estatal Anticorrupción.
El proceder de la Universidad Autónoma de Aguascalientes en lo referente a legalidad,
anticorrupción, rendición de cuentas y transparencia, ha derivado en los siguientes RESULTADOS
(enfocados aquí a lo referente al tema en el que se nos difama):
I. El Instituto de Transparencia del Estado de Aguascalientes ha validado cada año el
cumplimiento total en la difusión de nuestras obligaciones. Esto quiere decir,
específicamente hablando del área de obra pública, que hemos difundido en la
plataforma de transparencia todos los procedimientos de licitación y adjudicación directa
en los términos correspondientes. Además, el desahogo de estos procedimientos es
completamente público y es transmitido por nuestra institución, a través del siguiente
portal http://conferencias.uaa.mx/userportal/#/home/main
II. En los últimos tres años de revisiones, la Auditoría Superior de la Federación determinó
que no existe ninguna observación para nuestra casa de estudios, después de haberla
sometida a un escrupuloso proceso de fiscalización de su obra pública ejecutada a través
de los programas FAM Superior y Media Superior, así como el de Escuelas al Cien,
correspondientes a las cuentas públicas 2019, 2020 y 2021.
III. En el mismo periodo ningún contratista de los cientos que participaron en todas las
licitaciones ha acudido al Órgano Interno de Control a inconformarse, aunque es un
recurso previsto en la Ley. Cabe mencionar que en cada una de las etapas de licitación
participa la Contraloría Universitaria para dar fe de los procesos realizados.
IV. Durante estos últimos tres años, la UAA ha ejercido más de 150 millones de pesos en obra
pública; de este total únicamente fueron asignados de manera directa 15 mdp: muy por
debajo de los límites establecidos en la Ley. Ninguna de estas asignaciones ameritó
observación alguna por parte de la Auditoría Superior de la Federación. Además, cada
proceso se hizo con la máxima difusión en sus procesos de contratación y más allá de lo
previsto por la Ley, sin señalamientos de posibles daños patrimoniales y sin
inconformidades por parte de los contratistas participantes.
Por todo lo expresado, se puede concluir que en la UAA los recursos asignados a obra se han
apegado de manera irrestricta al cumplimiento de cada una de las disposiciones establecidas en
las legislaciones federales, estatales y propias aplicables en materia de planeación,
programación, presupuestación, contratación, ejecución, comprobación y rendición de cuentas.
Además de lo dicho, también damos respuesta aquí al señalamiento expreso del actual
presidente del Colegio de Arquitectos del Estado de Aguascalientes, quien manifestó que —por
desconocimiento de la ley o para realizar licitaciones a modo— no se les invitaba a los procesos
de licitación convocados por la UAA. Como apenas un ejemplo y evidencia de que la acusación
carece de fundamentos, le recordamos que en la licitación pública estatal UAA-LOPEA-008-2022
se realizó invitación a ese Colegio, tanto por correo electrónico como de manera física (su
recepción está acreditada mediante sello y firma fechada el 4 de agosto del año en curso).
En este proceso participó el Arq. Ignacio Jiménez Armas, pero no en la calidad de presidente del
Colegio de Arquitectos, sino como contratista participante, por lo que el cuerpo colegiado quedó
sin representación. No está de más recordar que la propuesta de Jiménez Armas fue rechazada
por no cumplir con lo establecido en la Fracc. III inciso c) del artículo de la LOPSREAM, los artículos
66,74,80,94, 112 y 113 del Reglamento de la LOPSREAM y lo indicado en el numeral 8 y 12 de las
bases de la invitación.
Con independencia de estos hechos, debemos señalar que la UAA opera su Comité de Obra
Pública de conformidad con la Ley Federal y Estatal de Obra Pública, así como de acuerdo a su
Manual de Operación publicado en el POE el 14 de octubre de 2013.
En vista de todo lo anterior, reiteramos nuestro extrañamiento por la inédita e ignominiosa
posición adoptada desde el Colegio de Arquitectos de Aguascalientes, cuya notable falta de
fundamentos amerita cuestionar la motivación de sus firmantes. Esperamos se entienda que, por
el nombre y la dignidad de nuestra casa de estudios, la UAA no puede dejar pasar acusaciones de
este tipo, así como ninguna clase de actos similares, sin importar cuáles sean sus intenciones o
justificaciones. Exhortamos a este cuerpo colegiado, así como a la sociedad en general, a que nos
conduzcamos con civilidad, ética y honestidad, en un marco de legalidad y el respeto que nos
debemos como instituciones y como personas.