El superadobe, una opción para la construcción de manera sustentable

Redacción

Tal vez nunca hayas escuchado hablar del superadobe, aunque seguramente conozcas el adobe. El adobe tradicional se forma mezclando tierra con ciertas arcillas y arenas y sumándole luego otros elementos como paja, estiércol de animales o pelos, elementos que pueden variar según el territorio.

El superadobe, por su parte, necesita de tres materiales principales: tierras, sacos degradables y alambres.

“Es una técnica de bioconstrucción que básicamente consiste en sacar tierra, una tierra que es parecida al adobe tradicional, en costales, mangas de polipropileno. Luego se compacta, se apila, y se va interponiendo una línea de alambre de púas para formar una estructura abovedada, como un huevo, digamos”, explica la arquitecta especialista en bioconstrucción Adriana Fernández. Después se genera una “capa de protección” que puede ser de tierra con paja, pelo o arcillosa, y luego se agrega una capa de cal.

Se trata de una técnica amigable con el ambiente por dos motivos. Por un lado, no genera residuos; y por otro, requiere un uso muy bajo de energía. Como resultado, la huella de carbono de la construcción con superadobe es menor a la de otras técnicas.

Otra ventaja es que es una técnica fácil de aprender, según Fernández, quien trabaja en SuperAdobe México, un grupo que busca difundir la autoconstrucción mediante este mecanismo. Según la especialista, una persona capacitada trabajando en conjunto con una cuadrilla de tres o cuatro más puede construir un domo sencillo en cinco semanas. 

Lograr un sistema de construcción barato y sencillo es clave en México, donde al problema de falta de vivienda se suma que más del 25% de la población vive en construcciones con algún tipo de riesgo o hacinamiento, según los datos del Gobierno de 2021.

Con información de CNN