Redacción
A casi cinco meses del fallecimiento de Silvia Pinal, la icónica actriz del cine de oro mexicano, su familia enfrenta una nueva polémica: la venta de la casa del Pedregal, valuada en 65 millones de pesos, que fuera su residencia durante décadas.
Según reveló el influencer Arturo Gallegos, Alejandra Guzmán y Luis Enrique Guzmán, dos de los tres hijos de la actriz, buscan deshacerse del inmueble por no poder solventar los gastos de mantenimiento. “No creen tener la fuerza económica, ni lo que conlleva mantener una casa de ese tamaño, de ese calibre”, declaró Gallegos.
El conflicto se intensificó luego de que trascendiera que Luis Enrique estaría involucrado en un proceso legal por una demanda laboral relacionada con su antigua pizzería. De acuerdo con el paparazzi Kadri, la querella derivó en una orden de embargo y una deuda que superaría los 400 mil pesos.
Mientras tanto, Sylvia Pasquel, la hija mayor de Pinal, se opone a la venta. Según versiones difundidas por la periodista Inés Moreno, la propia Silvia Pinal habría designado a Alejandra como heredera del predio, aunque la cantante no mostró interés y Luis Enrique se instaló en la propiedad. Además, dejó otra vivienda en el mismo terreno a su hija y su pareja.
Moreno también indicó que Luis Enrique pretende desalojar a Sylvia Pasquel, aprovechando su posible participación en la próxima edición de La casa de los famosos México, para sacar sus pertenencias.
A la disputa por el inmueble se suma ahora la pugna por pertenencias personales de la actriz, como sus joyas. “Están en disputa muchos bienes… Alejandra Guzmán siente que las joyas le pertenecen a Frida Sofía, mientras que Sylvia Pasquel asegura que su madre siempre consideró a Michelle Salas como quien representaba el porte”, afirmó Gallegos.
La casa, construida en 1955 por el arquitecto Manuel Rosen, fue adquirida por Silvia Pinal tras protagonizar Cabo de hornos. Con alberca, bar, jardines y terraza, sirvió de escenario para telenovelas como María Isabel.