Redacción
Uno de los peores criminales en la historia de Reino Unido, Peter Sutcliffe, apodado el “destripador de Yorkshire” falleció este viernes, anunció el ministerio de Justicia británico.
El hombre, quien asesinó a 13 mujeres y que fue condenado a cadena perpetua, había sido diagnosticado con Covid-19, pero rechazó toda la atención médica, de acuerdo con los medios locales.
Además del Covid-19, el sujeto sufría de trastornos cardiacos y diabetes.
“Peter Sutcliffe era un individuo depravado y malvado cuyos crímenes causaron un sufrimiento y una consternación inimaginables al país. Nada borrará nunca el mal que causó, pero es justo que haya muerto entre rejas por sus bárbaros asesinatos”, afirmó un portavoz del primer ministro Boris Johnson.
Tras los crímenes cometidos a lo largo de 1970, Sutcliffe fue condenado en 1981 a 20 cadenas perpetuas por la mutilación de 13 mujeres y por haber intentado matar a otras 7 entre 1975 y 1980.
Él decía que tenía la “misión divina” de matar prostitutas, sin embargo, no todas sus víctimas fueron trabajadoras sexuales.
Tras ser diagnosticado con esquizofrenia, pasó 30 años en un hospital psiquiátrico y posteriormente fue recluido en una prisión de Durham.
Gracias a una serie de errores policiales, logró escapar durante algunos años, pero en 1981 fue encontrado, cuando elementos de vialidad se percataron de que el vehículo que conducía tenía placas falsas.
Ya en 2010, la Alta Corte estableció que nunca debería salir de prisión.
Con información de Excélsior