José María de la Torre: 12 años de fe y controversias

Gilberto Valadez

Aguascalientes, Ags.- En 12 años como máximo jerarca religioso de Aguascalientes, José María de la Torre Martín se caracterizó por promover sínodos católicos en la entidad y de mantener las tradiciones religiosas; pero también cayó en diversas controversias que tuvieron alcance internacional.

Nacido en 1952, en la población de Pegueros, estado de Jalisco, de la Torre Martín llegó a Aguascalientes en 2008 tras la muerte del purpurado Ramón Godínez Flores y convertirse en el séptimo obispo en la historia de la diócesis.

Luego de más de un mes de permanecer hospitalizado, el jerarca religioso falleció oficialmente este lunes 14, confirmaron fuentes del obispado local.

Relativa duración

Con una docena de años al frente de la iglesia católica de Aguascalientes, José María de la Torre mantuvo un obispado con relativa duración; aunque lejos de los más extensos en la historia de la diócesis.

De la Torre Martín permaneció como jerarca eclesiástico por más tiempo que su inmediato antecesor, Ramón Godínez Flores, quien ejerció el cargo por poco más de ocho años, así como de José María Portugal, primer obispo en la historia de Aguascalientes, que sumó una década de gestión.

A cambio, los obispados más longevos en Aguascalientes continúan siendo el de Salvador Quesada, con 33 años, pese a la presencia de un coadjutor que se le asignó entre 1975 a 1976; así como el de José de Jesús López y González, que estuvo dos décadas al frente del clero local entre 1930 a 1950.

El Sínodo y las ordenaciones

El entonces Papa Benedicto XVI designó a José María de la Torre al frente de la diócesis de Aguascalientes el 31 de enero de 2008, aunque tomaría posesión formalmente hasta el 13 de julio del mismo año.

Dentro de sus logros como guía religioso, destaca la organización del Tercer Sínodo Diocesano de Aguascalientes, realizado a mediados de 2014, bajo el lema “Es mejor avanzar juntos, siguiendo los pasos de María misionera”, el cual abordó aspectos como evangelización y catequesis, liturgia, pastoral social, prioridades pastorales, laicos y estructuras pastorales.

Durante la apertura del Sínodo, el obispo dijo en su mensaje: “honor para todos de participar en un evento histórico. No dudo en que todos pondrán lo mejor de sí mismos para constituirse en mediadores de la gracia de Dios”.

También el jerarca mantuvo la organización de tradiciones católicas en la ciudad capital, como la Romería de la Virgen de la Asunción, que se celebra cada 15 de agosto; además de las fiestas patronales en barrios como el de Triana. Las cuales se suspendieron este año, debido a la pandemia.

En uno de sus últimos actos públicos del año pasado, el 13 de octubre de 2019, encabezó la ordenación de doce nuevos sacerdotes y tres diáconos.  En su mensaje, dijo a los ahora ministros religiosos “para convertirse en sacerdotes santos, oren siempre, no pierdan lo que la voluntad divina les ha concedido”.

Las controversias

Sin embargo, el obispo de Aguascalientes acumuló diversas controversias a lo largo de su gestión. Algunas de alcance global.

En el 2013 llamó “carne de buey” y “gusanos de la inquina” a los diputados locales porque se negaron a debatir la penalización del aborto. Varios legisladores federales exigieron una disculpa pública al prelado además de que se le aplicara una sanción. Sin embargo nada sucedió.

Posiblemente una de las más notables ocurrió para finales de 2014, cuando comparó el matrimonio homosexual con la zoofilia. “Si se permiten las bodas entre homosexuales mañana van a permitir que un señor se case con un perro y puedan heredar a los perritos”, dijo a los medios. Esta declaración fue retomada por agencias de noticias internacionales y el obispo recibió una llamada de atención por parte del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) quien logró que el obispo ofreciera una disculpa pública.

Sin embargo, dos años después volvió a arremeter contra la comunidad de la diversidad sexual y el 10 de agosto de 2016, calificó a los matrimonios entre personas del mismo sexo como “quesadillas sin queso”.

También se vio envuelto en discusiones políticas, luego que, tras la elección por la gubernatura en 2016, el obispo promovió abiertamente votar por quien defienda “los principios y los valores del evangelio”.

En las urnas, Martín Orozco, del PAN, venció a Lorena Martínez, del PRI, la cual encabezó una impugnación ante instancias legales, citando entre otras supuestas anomalías la supuesta injerencia de José María de la Torre. El 19 de octubre de 2016, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ratificó el triunfo de Orozco en las urnas, pero acreditó la intromisión de sacerdotes católicos de Aguascalientes en el proceso.

Al día siguiente, Lorena Martínez concedió una entrevista al portal Aristegui Noticias, en donde aceptó el fallo judicial, pero alertando “el activismo político de la jerarquía católica representa una amenaza para el Estado laico”.