Redacción
La cantante Isabel Pantoja regresó a los juzgados de Málaga para presentar su declaración ante el juez, acusada de ser cooperadora necesaria de un presunto delito de insolvencia punible, al no haber hecho frente a una deuda por la construcción de una de sus casas en 2015.
La tonadillera intentó por todos los medios verse de nuevo sentada en el banquillo de los acusados, pero no sus esfuerzos por llegar a acuerdo extrajudicial con la sociedad querellante en los últimos días, ni los informes médicos y psicológicos que presentó ante el juzgado demostrando que no se encuentra en condiciones de declarar, le dieron frutos.
Durante su declaración ante el juez, Pantoja no pudo contener el llanto ni ocultar sus nerviosismoy su dolor por regresar al que fue condenada a 24 meses de prisión por blanqueo de capitales por el caso Malaya.
Desolada, Pantoja hizo hincapié en que desconocía el presunto delito por el que está siendo juzgada, ya que, mientras estuvo en prisión, tema del que nunca había hablado hasta ahora, “no recibía la visita de mis abogados”. “Las únicas visitas que recibía eran las de mis hijos, mi sobrina y mi hermano Agustín. Solo nos abrazábamos y hablábamos de salud, no de dinero”, concluyó.
Con información de TV Notas