El narcotraficante que tuvo una calle con su nombre en Aguascalientes

Gilberto Valadez

San Francisco de los Romo, Ags.- El silencio matinal impera en la calle Emiliano Zapata de la colonia Macario J. Gómez, pequeña comunidad situada en este municipio conurbado con la capital del estado.

Un silencio que se interrumpe debido al sonido de una campana que toca el conductor de un camión distribuidor de tanques de gas.

Esta comunidad ubicada a poco más de una decena de kilómetros de la ciudad capital, tiene poco más de dos mil pobladores, según registros oficiales, apenas rebasa las tres décadas de existencia. 

Hacia 1991 era un asentamiento irregular, pero al año siguiente, cuando San Francisco de los Romo fue declarado de manera oficial nuevo municipio, la colonia empezó a contar con servicios públicos.

Una de sus avenidas actuales es Emiliano Zapata, en donde hay algunas casas particulares y una amplia finca que parece abandonada. Cuenta con una tienda de abarrotes y un taller casi en la periferia donde termina la población. Por lo demás, no se registra demasiado movimiento en la arteria pavimentada en su mayor parte, salvo en su parte más inclinada al norte, donde el camino está empedrado.

Parece que poca gente recuerda que hace dos décadas la calle dejó su nombre original y se le dedicó a un personaje ligado al crimen organizado.

Se busca…

El 28 de agosto de 2002, Felipe González emanado del PAN gobernaba el estado y Héctor Manuel Álvarez Gutiérrez era propietario de un par de restaurantes de carnes finas en esta ciudad, fue detenido en las afueras de una de sus negociaciones por elementos de la Agencia Federal de Investigación.

Eduardo Antúnez, a la sazón delegado de la entonces Procuraduría General de la República, dio a conocer que Álvarez Gutiérrez, a quien apodaban el Tijuano, había sido capturado en cumplimiento a una orden de aprehensión dictada por un juez de distrito en la Ciudad de México, a fin de ser extraditado a Estados Unidos.

El Tijuano se le vinculó al cartel de los Arellano Félix, siendo reclamado por autoridades de California, debido a cargos por asociación delictuosa, además de posesión y venta de metanfetaminas. También se le mencionó con el secuestro y muerte de un hijo de la cantante Beatriz Adriana.

Luego de su detención, Álvarez fue trasladado por vía aérea a la capital del país y luego extraditado al vecino país del norte. Sin embargo, su caso no quedó ahí.

El benefactor…

A los pocos días después de la detención, se dio a conocer que El Tijuano tenía una calle con su nombre, en la comunidad Macario J. Gómez, del municipio conurbano de San Francisco. La arteria era entonces una vialidad sin pavimentar y con varias nomenclaturas que indicaban el nombre de “H. Manuel Álvarez”.

El periodista Luigi Rivera dio a conocer la información en el diario El Universal, en la edición del 29 de agosto de ese año, reveló la existencia de la llamada narcocalle, donde el aludido tenía una finca y recogió testimonios de vecinos de la comunidad, quienes reconocieron en Álvarez a un benefactor que había ayudado de manera económica a pobladores y hasta a la capilla de la localidad.

Inclusive se retomó el testimonio del priista Francisco Javier Martínez, primer presidente municipal de San Francisco de los Romo en 1992 y que para ese 2002 era diputado local, en donde admitió que conoció personalmente al Tijuano en su campaña para la alcaldía; pero negó haber recibido apoyos del narcotraficante.

El escándalo llegó a las pocas semanas al Congreso del Estado. Diputados de la bancada mayoritaria del PAN acusaron al PRI de mantener una relación con Álvarez; lo que rechazaron los tricolores.

Tras la polémica, la alcaldía de San Francisco de los Romo retomó el nombre de la calle por el de Emiliano Zapata.

La sombra de la delincuencia…

De lo último que se supo del Tijuano fue hace diez años y aún permanecía en el país. Concretamente en un penal de Matamoros, Tamaulipas.

El pasado 18 de agosto de 2012, mediante una nueva decisión de un juez se le había dictado otro auto de formal prisión. Ahora por robo equiparado calificado. Esto se vino a sumar a sus anteriores expedientes por delincuencia organizada.

La propia colonia Macario J. Gómez tampoco escapó a la sombra de la delincuencia en el estado.

El 11 de enero de 2019, una pareja asaltó a mano armada y con violencia una gasolinera situada en esta zona. El suceso generó una persecución policiaca que se extendió al norte del estado que terminó en una balacera en la que uno de los presuntos delincuentes fue muerto y un policía salió herido.