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Redacción Aguascalientes, Ags.- El exgobernador del estado el priista, Otto Granados Roldán, durante su comentario editorial que emite los viernes en la estación de Radio Bi, recordó que los actos de corrupción que cometió Luis Armando Reynoso Femat durante su sexenio del 2004 al 2010 fueron avalados por la complicidad de diputados del PRI y el PAN en su mayoría. Aquí el comentario editorial del actual Subsecretario de la SEP. Las nuevas revelaciones publicadas esta semana tanto en los Estados Unidos como en México acerca de la corrupción del ex gobernador Reynoso, simplemente confirman lo que por años se vino señalando en el sentido de que la suya había sido quizá la administración estatal notoriamente más corrupta y vulgar de que se tengan memoria en Aguascalientes. Los saldos eran y son inocultables, hubo un desprecio absoluto por el profesionalismo político, una administración extraviada, un claro retroceso en la mayor parte de las variables cruciales para el desarrollo y el bienestar del estado, una economía estancada y un costoso deterioro en la imagen de la entidad a nivel nacional, toda generalización es desde luego injusta, por lo tanto sería incorrecto ignorar que hubo ciertamente algunas dependencias y algunos altos funcionarios que hicieron su labor con eficiencia que produjeron decisiones atinadas y que aportaron al estado. Sería injusto igualmente afirmar que el deterioro del estado empezó con ese sexenio porque realmente empezó un sexenio atrás, y sería parcial omitir que parte del fracaso fue también responsabilidad de la falta de peso de decisión, de honestía y de valentía de los diputados que formaron parte de las legislaturas del congreso del estado entre 2004 y 2010 que en buena medida taparon y convalidaron las corruptelas que ante sus ojos se estaban cometiendo. Se le atribuye a Nort Arthon el gran historiados inglés haber acuñado una frase legendaria y exacta “El poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente” es la razón por la cual países más o menos democráticos establecieron una división de poderes entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial a fin de que entre los 3 operen sistemas de pesos y contra pesos, de balance y equilibrio, pero cuando uno de ellos pongamos el caso el legislativo renuncia a su papel de contra peso y de balance entonces se rompe por completo la estructura y se abre la puerta a los abusos, a los excesos y a las corrupciones, que en el sexenio de Reynoso haya ocurrido en |
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Aguascalientes lo que ahora sabemos que ocurrió fue desde luego la consecuencia de una ambición incontrolable pero fue también producto de que el gobierno estatal operó prácticamente sin contrapesos que le limitarán sus abusos, o en su caso que lo sancionarán. Quizá sea bueno recordar que en 2010 y lo dije precisamente en esta estación el ejemplo más preocupante de tal irresponsabilidad lo protagonizaron los diputados pertenecientes a esa legislatura a la hora de votar las cuentas públicas que es el instrumento mediante el cual en teoría los gobiernos rinden cuentas de cómo usaron el dinero público, en julio del 2010 con el voto de 19 diputados de casi todos los partidos se aprobaron las cuentas a pesar de las abrumadoras anomalías e irregularidades que encontraron. En contra en cambio votaron 8 legisladores y la entonces perredista Nora Ruvalcaba definió ese sexenio como una muestra de la brutal corrupción que se dio dijo ella todo el sexenio. |
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La moraleja es muy directa, porque algunos cometen barbaridades y corruptelas desde los cargos públicos, pues sencillamente porque pueden, porque quieren y porque hubo quienes se los permitieron. |