Gilberto Valadez
Aguascalientes, Ags.- El gobernador priista Carlos Lozano de la Torre descartó adelantar si pudiera integrarse a una posición en el gabinete federal, cuando concluya su gestión al frente del Ejecutivo durante el último día de noviembre próximo.
A pregunta directa sobre su futuro político, el mandatario no quiso avizorar nuevos encargos en el servicio público y lo dejó en manos de Dios, al que llamó “el Dios que no discrimina a nadie por su forma de pensar”
Entrevistado luego de concluir la apertura del Zapatón 2016 organizado por el DIF Estatal, Lozano de la Torre apuntó que restan cinco meses a su gobierno en el cual restan proyectos que finalizar.
“Todavía faltan unos meses, todavía tenemos unas tareas pendientes. A mis funcionarios les dije que faltan cinco meses, pero si los divides en horas y en minutos pues nos queda un rato para servirle a Aguascalientes. Tenemos planes en obra pública y conservar la tranquilidad que mantenemos en Aguascalientes”, declaró.
– Con la experiencia que ha acumulado, ¿le avala para integrarse al gobierno federal?
– Eso habrá que esperarlo. Ahorita la mente la tenemos con el 100 por ciento entretenida en servirle a Aguascalientes y ya después veremos.
– ¿El Gobierno no le ha hecho una invitación?
– No, no.
– ¿Pero no la despreciaría, obviamente?
– Toda mi vida he cumplido metas, he caminado y esperado a hacer otras cosas. Mientras la salud y Dios me lo permitan. El Dios de todos, que suma a todo mundo independiente de sus formas de pensar y de hacer, ese siempre es justo y siempre se acuerda de uno.
– ¿Qué pediría si le dieran a escoger?
– Muy difícil.
– ¿Una embajada?
– No, mejor aquí nos quedamos. Sino no los veo. (risas)
– ¿Serviría a Aguascalientes desde otra área?
– Siempre he servido a Aguascalientes desde que era joven, siempre ha sido mi vocación y mi sueño ha sido seguir sirviendo.
– ¿Qué opina de la iniciativa 3de3?
– Me parece que es un tema que se ha politizado. Yo siempre he presentado mis informes y nunca he tenido un problema con eso. Creo que son temas que se politizan más de lo que en realidad son.