Redacción
EEUU.- LeBron James, quien hace unas semanas se convirtió en el máximo anotador de la historia de la NBA, fue acusado por Chael Sonnen, exluchador de la UFC, de doparse con EPO para tener mejor resistencia en los partidos y tener esa musculatura a sus 38 años.
En este sentido declaró “tenemos el mismo camello, así que sé exactamente lo que toma. La EPO aumenta la cantidad de glóbulos rojos en sangre, lo que te da mayor resistencia en el partido. Es el Rey en los potenciadores de rendimiento”.
Según el médico Jesús Alcaraz Rubio de España, la Eritropoyetina (EPO) es una hormona que “permite concentrar más cantidad de masa globular roja, por lo que los músculos reciben más oxígeno y esto retrasa la aparición de la fatiga, cosa que han utilizado a lo largo de la historia a deportistas de élite dados al dopaje”.
Es de mencionar que la acusación por parte de Chael es grave y poco creíble, pues la NBA realiza pruebas de drogas con regularidad con el fin de tener un control de los jugadores de baloncesto donde tiene prohibidas sustancias como la cocaína, ketamina, LSD, metanfetamina, esteroides, drogas de mejora de rendimiento, enmascaradores y diuréticos con el fin de frenar el uso de PEDs (drogas para la mejora del rendimiento).
Siendo de destacar que lo curioso es que después de varios estudios, a finales de 2020 la Liga norteamericana llegó a un acuerdo para que se pudiera consumir marihuana durante esa temporada, pues varios jugadores y entrenadores han defendido el consumo del cannabis.
Kevin Durant declaró en febrero de 2020 durante el programa All The Smoke, “todos en mi equipo toman café todos los días. Los chicos salen a tomar vino después de los partidos o toman un trago de vez en cuando. La marihuana debería estar al mismo nivel”.
*Con información de FOX Sports