Redacción
El espectáculo de medio tiempo del Super Bowl LIX no solo dividió opiniones por la actuación de Kendrick Lamar, sino que también se vio marcado por un incidente que pasó desapercibido en la transmisión oficial: la detención de un bailarín que irrumpió con una protesta política.
Durante el show en el Superdome de Nueva Orleans, un hombre vestido de negro, igual que los acompañantes de Lamar, levantó una bandera de Palestina en plena presentación y saltó del escenario para correr por el campo con el estandarte en alto. La protesta, relacionada con el conflicto bélico en Medio Oriente, fue interrumpida rápidamente por elementos de seguridad, quienes derribaron al manifestante en la cancha y lo sacaron del recinto.
El video del momento se viralizó en redes sociales, generando debate sobre la censura y las manifestaciones en eventos deportivos de alto perfil. De acuerdo con reportes, el sujeto fue entregado a las autoridades, ya que este tipo de expresiones están prohibidas en el Super Bowl.