Tren de la Salud da esperanza de vida a joven con insuficiencia renal en Ags.

Andrés Rojo

Aguascalientes, Ags.- La caravana del Tren de la Salud permitió en su visita por Aguascalientes que decenas de personas tuvieran acceso a atención médica de calidad. Esta oportunidad también sirvió para que un joven de 25 años de edad, de nombre Jesús Contreras Arriaga, y enfermo de insuficiencia renal desde hace varios años pudiera tener una nueva esperanza para erradicar su padecimiento y seguir viviendo.

Desde hace 11 años Jesús padece insuficiencia renal, misma que se ha ido agudizando con el paso del tiempo, hasta el grado de que en el Seguro Social ya lo daban por desahuciado.

A los 14 años de edad comenzaron los dolores en los riñones, lo cual significaba una señal de alarma de la enfermedad que estaba por llegar. Pero, en ese momento los doctores que atendían a Jesús adjudicaban estas dolencias a que se masturbaba demasiado, por lo que se dejó crecer el padecimiento.

Años después, sus dos riñones le dejaron de funcionar al grado de que su mamá tuvo que donarle uno de los suyos para poder darle una oportunidad de vida a su hijo. Pero la felicidad sólo duró 6 años ya que el riñón también volvió a dejar de funcionar.

Pero además de la insuficiencia renal, ahora se habían acumulado otras afectaciones en los intestinos debido a la gran cantidad de operaciones a las que ha sido objeto. En una de estas cirugías se le perforó la zona del intestino que absorbe los nutrientes por lo que los médicos prácticamente ya daban por muerto a Jesús.

De esta manera, y con una salud en decadencia pero con la ilusión de salir adelante, Jesús acudió a la caravana del Tren de la Salud “Dr. Vagón” en Rincón de Romos, en donde pudo ser observado por doctores de gran capacidad, quiénes le dijeron que en la Ciudad de México en el Hospital Siglo XXI y en el Hospital de Nutrición hay los especialistas necesarios, para sacarlo adelante, poder nutrirlo y realizarle un transplante de intestino, lo que sin duda le devolvió el ánimo y la esperanza de seguir viviendo, toda vez que las instituciones de salud a las que había acudido le habían dicho que ya no había nada por hacer.

Fue el doctor Iván Terrones, del Dr. Vagón, el responsable de recibir a su llegada a Jesús Contreras Arriaga, tras darle las primeras atenciones y revisar su expediente, lamentó los pronósticos fatalistas que le habían dado.

Incluso el propio galeno se ofreció a buscar personalmente algún tipo de enlace entre Jesús y los especialistas en su enfermedad una vez que regrese a la Ciudad de México, dentro de 15 días.

Actualmente Jesús está casado y tiene tres hijos, motivos suficientes para seguir en la batalla incesante de la vida y con la esperanza de que su salud mejore para seguir siendo un ejemplo de vida para los suyos.