Veo Verde
CDMX.- ¿Sabías que un tercio de los alimentos producidos en el mundo se desperdician? Sólo lo que se desaprovecha en América Latina al año serviría para satisfacer las necesidades de todos los chilenos por casi 50 años.
La Organización de las Naciones UNidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) define la pérdida y desperdicios alimentarios como la disminución de los alimentos para el consumo humano debido al comportamiento de quienes desechan alimentos consumibles.
Cerca de un 30 por ciento de estas pérdidas ocurren en nuestras casas, donde los consumidores somos los únicos responsables. Estos desperdicios no sólo contribuyen a la desigualdad del acceso a la alimentación, sino que ocupan gran parte de suelos (más que Canadá e India juntos), consumo de agua limpia (casi cuatro veces el consumo de todo Estados Unidos) y contribuyen al efecto invernadero (si los desperdicios fueran un país, ¡sería el tercero con mayor huella de carbono!).
¿Cómo podemos contribuir a disminuir estas pérdidas alimentarias? Acá te dejamos algunos útiles consejos.
Comprar justo lo que necesario, ojalá semanalmente.
Planificar tus comidas.
Cocinar sólo lo que vas a comer, sino congelar o regalar lo que quede.
Las frutas y verduras muy maduras usarlas en otro tipo de preparaciones no frescas, como jugos, sopas, etc.
Elegir frutas con formas diferentes o “feas”, ¡tienen el mismo sabor!
Aprende a utilizar todo lo que venga con tu fruta o verdura, tallos, hojas, hasta cáscaras. ¡Sé creativo!
Consumir primero lo que está más próximo a vencer.
Pero por sobre todo, ayuda a crear conciencia en tu casa y tus cercanos.
Dentro de 30 años la producción alimentaria debería aumentar un 70% para satisfacer a toda la población, pero los suelos cultivables serán insuficientes debido a la creciente población. Optimizar el proceso agrícola, especialmente en un país que es potencia en el sector como Chile, es responsabilidad de todos. Es nuestro deber crear conciencia y cambiar nuestros hábitos alimentarios. Parte en casa, contigo.
*Nutricionista de la Universidad Católica y cofundadora de RecyclEat.