Surgen nuevos datos sobre la inmunidad al coronavirus

Redacción

¿Volverse a infectar de coronavirus es posible? Aún no se sabe bien cómo es esa inmunidad ni durante cuánto tiempo nos protege, pero poco a poco van surgiendo algunos indicios al respecto.

Las alarmas fueron encendidas con varias personas de Corea del Sur que habían superado la COVID-19 volvían a dar positivo en los test. La noticia causó una gran preocupación, porque muchas políticas relativas a la gestión de la pandemia y a la prevención de nuevos brotes se basan el papel de los inmunes. Sin embargo, hace pocos días un diario del país asiático se hacía eco de un amplio estudio que vendría a confirmar que se trataba de falsos positivos, y que en realidad estas personas no se habrían infectado de nuevo.

La explicación radica en que las PCR identifican material genético del virus, pero no son capaces de diferenciar si este está vivo o muerto, por lo que muy probablemente se tratase de restos del virus, pero este no estaría activo y por tanto estas personas no serían contagiosas.

No contagian pero… ¿son inmunes?

La noticia es tranquilizadora, pero no dice nada sobre la inmunidad adquirida: ¿producen los pacientes que han superado la enfermedad una cantidad suficiente de anticuerpos como para estar protegidos frente a un rebrote? Y, en ese caso, ¿cuánto tiempo dura esa inmunidad?

Un estudio que se acaba de publicar en la revista Immunity indica que la mayoría de personas dadas de alta producen anticuerpos y células de tipo T específicas para el virus, pero las respuestas varían entre pacientes. Los resultados obtenidos de algunas de las personas evaluadas a las dos semanas después del alta sugieren que estos anticuerpos se mantendrían durante, al menos, ese periodo de tiempo.  Por otro lado, este trabajo indica qué partes del virus son más efectivas para desencadenar estas respuestas inmunes y podrían ser el objetivo de vacunas potenciales.

Producción de anticuerpos

En concreto, todos los pacientes estudiados mostraron niveles más altos de inmunoglobulinas, tanto IgM –que se producen durante la fase activa de la enfermedad– como IgG –que se producen más tarde y se mantienen en la fase de memoria–, que se unen tanto a la proteína nucleocapsídica SARS-CoV-2, que encapsula el ARN genómico viral, así como el dominio de unión al receptor de la proteína S (S-RBD), que se une a los receptores en las células huésped durante el proceso de entrada viral. Tomados en conjunto, estos hallazgos muestran que los pacientes con COVID-19 pueden desarrollar respuesta inmunitaria a las proteínas del SARS-CoV-2 y sugieren que estos anticuerpos se mantendrían durante al menos dos semanas después del alta.

Posibles dianas para vacunas

Por otro lado, los resultados indican que la cantidad de anticuerpos neutralizantes estaba asociada de forma positiva con los anticuerpos IgG contra el dominio de unión al receptor de la proteína S, pero no con los que se unen a la proteína de la nucleocápside. Además, el S-RBD indujo respuestas de anticuerpos y de células T. “Nuestros resultados sugieren que S-RBD es un objetivo prometedor para las vacunas contra el SARS-CoV-2”, dice Fang Chen, investigador del Hospital Chui Yang Liu, afiliado a la Universidad de Tsinghua (China) y coautor del estudio. “Pero nuestros hallazgos necesitan más confirmación en una gran cohorte de pacientes con COVID-19”.

Con información de Muy Interesante