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Buenos Aires, Arg.- El reciente error del arquero Augusto Batalla, que se suma a una lista de pifias que el portero viene cometiendo desde que heredó los tres palos de River que defendió Marcelo Barovero, hace que en los pasillos del Monumental se baraje la posibilidad de traer otro uno que compita por el puesto en el venidero libro de pases. Para eso, justamente, desde la mesa chica del Millonario han estado mirando la Liga MX y quienes suenan con fuerza son dos argentinos.
Ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro, el último fin de semana por liga argentina, Batalla tuvo responsabilidad directa en el gol triunfal anotado por el paraguayo Paulo Díaz. Tras un mal rechazo de puños, que rebotó en Díaz y luego se metió en su propia portería, la derrota dejó atrás a River en la lucha por el campeonato. Esa pifia, justamente, generó un murmullo en Núñez.
Los nombres que comenzaron a sonar inmediatamente son el del portero Marcelo Barovero, del Necaxa, y Cristian Campestrini, de paso por el Puebla. Barovero logró seis títulos con La Banda y fue quien le heredó la portería a Augusto Batalla, alguna vez sondeado por el Real Madrid, previo a armar las maletas y desembarcar en la Liga MX.
Mientras que Campestrini, de buena experiencia en el fútbol argentino en el Arsenal de Sarandí, sonó alguna vez en los pasillos del Monumental pero jamás se llegó a concretar nada pues el último tiempo ‘Trapito’ tenía bien custodiado el puesto.
Por otro lado, nombres que también serían bien vistos en el ecosistema riverplatense, pero resultaría por cuestiones económicas más complicado abrocharlos, son los de Agustín Marchesín, del América, y Nahuel Guzmán, de Tigres.
Los hinchas riverplatenses tienen a Augusto Batalla en el ojo de la tormenta, en la dirigencia se generan opiniones divididas, mientras que el técnico Marcelo Gallardo lo respalda tal cómo lo respaldó el primer día en conferencia de prensa. “Quien reemplazará a Barovero en el arco seguramente sea Batalla”.
A tres fechas del final de la temporada, Augusto Batalla sabe que tendrá la lupa puesta sobre él. Ya sin margen de error, pues sus otras equivocaciones que costaron goles se dieron en los últimos dos Superclásicos y la final de la Copa Argentina el año pasado, el arquero de River buscará revertir de alguna forma su imagen pues es probable que desde México le llegue competencia.