Papa León XIV pide una Iglesia en la que no haya “olvidados o despreciados”

Por Redacción

Roma.- Al cumplir su primer mes como sumo pontífice, el Papa León XIV presidió la misa de Pentecostés en la que pidió una Iglesia que abra fronteras entre naciones y que, además, no haya “ni olvidados ni despreciados”.

De igual manera, León XIV reiteró el llamado a la unidad y a la fraternidad, en donde también criticó la “lógica de la exclusión” que surgen en los nacionalismos políticos y cuestionó los recientes casos de feminicidio.

“Somos verdaderamente la Iglesia del Resucitado y los discípulos de Pentecostés sólo si entre nosotros no hay ni fronteras ni divisiones, si en la Iglesia sabemos dialogar y acogernos mutuamente integrando nuestras diferencias, si como Iglesia nos convertimos en un espacio acogedor y hospitalario para todos”, declaró.

Según datos de la Oficina de Prensa del Vaticano, alrededor de 80.000 personas se congregaron en la Plaza de San Pedro y en las áreas circundantes.