Mnangagwa tomará posesión como nuevo presidente de Zimbabue

AP News

Zimbabue.- El recién cesado vicepresidente de Zimbabue regresará el miércoles al país para tomar posesión como su nuevo líder tras la renuncia de Robert Mugabe en la víspera, en medio de un proceso de juicio político en su contra.

La televisora estatal reportó que Emmerson Mnangagwa llegará a una base militar de la capital del país, Harare, a las 18:00 horas, y asumirá la presidencia de la nación africana el viernes.

Los zimbabuenses respondieron al anuncio celebrando y bailando en las calles hasta altas horas de la noche del martes, emocionados por dejar atrás a un mandatario cuyas primeras promesas tras el final del gobierno de minoría blanca en la década de 1980 se vieron superadas por el colapso económico, la disfunción del gobierno y violaciones de derechos humanos.

Ahora el foco estará puesto en Mnangagwa, quien durante años fungió como vicepresidente de Mugabe y que fue apartado a principios de este mes mientras la impopular primera dama, Grace Mugabe, se posicionaba para sustituirlo a él y a su esposo. Mnangagwa huyó del país alegando que había recibido las amenazas.

Esto llevó al ejército a intervenir hace una semana, abriendo la puerta a que tanto el partido gobernante como el pueblo se expresase públicamente en contra de Mugabe.

Por el momento no está claro qué harán ahora Robert Mugabe, de 93 años, y su esposa. En su carta de renuncia, el expresidente, que era el jefe de Estado de más edad del mundo, dijo que el proceso legal debería seguir con el nombramiento de un nuevo presidente “no más tarde de mañana”.

Se espera que el presidente del parlamento ofrezca una conferencia de prensa a mediodía sobre el proceso a seguir.

A su regreso a Zimbabue, Mnangagwa se reunirá con el jefe del ejército, Constantino Chiwenga, y con funcionarios del partido gobernante y se espera que “se reúna con Mugabe para una sesión informativa”, reportó el diario Newsday.

Los zimbabuenses se despertaron el miércoles sin Mugabe en el poder por primera vez en 37 años. Con algunos sufriendo los efectos de la fiesta de la noche anterior, en los quioscos de prensa podían leerse titulares como “Adiós presidente Bob y Ta-Ta”.

“Creo que este cambio de gobierno es como un nuevo soplo de aire fresco para todo el país”, dijo Patrick Musira en las calles de Harare. “Todo el mundo estaba entusiasmado y esperan un futuro mejor, un futuro brillante con trabajo”.

Los nuevos líderes de Zimbabue se toparán con una nación, en su día próspera, cuya economía ha colapsado haciendo que jóvenes que recibieron una buena educación tengan que trabajar como vendedores callejeros por desesperación. Muchos de ellos se marcharon del país.

Mnangagwa fue ministro de Justicia y Defensa y durante décadas fue el responsable de la mano dura en el gobierno de Mugabe, lo que le valió el sobrenombre de “Cocodrilo”. Muchos partidarios de la oposición creen que fue clave en la muerte de miles de personas a manos del ejército cuando Mugabe se levantó contra un rival político en la década de 1980.

En la actual crisis política, Mnangagwa ha empleado un lenguaje inclusivo. En un comunicado previo a la dimisión de Mugabe, señaló que todos los zimbabuenses deben trabajar juntos para que la nación avance.