La extensa lista de quarterbacks que podrían moverse este año

Redacción

La temporada 2019 de la NFL está alcanzando su etapa final. Solo quedan siete partidos de postemporada antes de encontrar al campeón que será el sucesor de los Patriots, que cayeron eliminados en la ronda de comodines ante Tennessee y Tom Brady podría convertirse en agente libre si los Pats lo cortan antes del 17 de marzo, lo que agrega un nombre más a una de por sí cargada lista de quarterbacks que podrían moverse este año, entre agentes libres y selecciones del Draft, que suma un nombre más tras el anuncio de Tua Tagovailoa de que no volverá a Alabama para su última temporada en la NCAA.

Comenzamos con los agentes libres. Asumiendo que los Pats optan por dejar libre a Brady y no pagarle $62 millones por las siguientes dos temporadas, algo sensato por los problemas de tope salarial del equipo, tenemos nueve jugadores que tienen opciones de ser titulares en 2020 y que actualmente no tienen contrato: Tom Brady, Drew Brees, Philip Rivers, Ryan Tannehill, Jameis Winston, Teddy Bridgewater, Marcus Mariota, Eli Manning y Case Keenum.PUBLICIDAD

Es posible que Brady, Brees y Rivers vuelvan a sus equipos, aunque el retiro no hay que descartarlo para ninguno. Ryan Tannehill, tras ser el líder en rating en 2019, salvar la temporada de los Titans y ganar en la ronda divisional puede que se haya asegurado un nuevo contrato en Tennessee, dejando a los otros cinco con serias opciones de moverse.

Jameis Winston fue el líder en yardas en 2019, pero sus 30 touchdowns y 30 intercepciones muestran su capacidad de pasar de lo sublime a lo ridículo, y Tampa Bay podría optar por darle a Bruce Arians el QB de su gusto, no uno heredado. Teddy Bridgewater nunca ha sido una superestrella, pero puede que haya ganado la oportunidad de volver a ser titular al no perder con los Saints en el tiempo que Drew Brees estuvo fueraMarcus Mariota nunca tuvo estabilidad de entrenadores y esquemas en Tennessee, que no explotaban sus facultades que parecen mandadas a hacer para la NFL moderna, pero en 5 años tampoco mostró capacidad constante de hacerlo. Eli Manning ya dijo que no quiere ser suplente (que alguien le dé la titularidad es un tema aparte), por lo que podría optar por el retiro si no encuentra una opción, y Case Keenum se ha pasado los últimos años ‘calentando’ el asiento de quarterbacks novatos (Goff, Haskins). Es uno de los mejores suplentes de la liga, y aunque tuvo una buena temporada en 2017 a llevar a Minnesota a la final de la NFC, tampoco ha tenido mucho éxito como titular, con marca de 27-35.

Además de los 9 ya mencionados, hay otra media decena que tiene todavía contrato vigente, tienen experiencia de sobra en la liga y podría cambiar de aires.

Las lesiones le han costado los últimos dos años a Cam Newton, que llega a su último año de contrato en Carolina y el equipo podría optar por una nueva dirección, ya que tienen un nuevo dueño que ya está cambiando el equipo para hacerlo ‘suyo’. Despidió a Ron Rivera y el siguiente paso podría ser traer un nuevo mariscal. Podrían cortar a Cam y solo deberían pagarle 2 de los 21.1 millones que tiene en su contrato para 2020.

Andy Dalton parece tener las horas contadas en Cincinnati, que tiene la primera selección del Draft y apunta a Joe Burrow. Nunca fue la panacea como QB, pero llevó cinco años consecutivos a los Bengals a la postemporada.

Ryan Fitzpatrick lo hizo bien en Miami, pero tiene 37 años y no es la solución a largo plazo. Podría quedarse como la veterana influencia para un novato o algún otro equipo podría firmarlo vía cambio. Su contrato es barato, con solo 8 millones para 2020 y si los Dolphins decidieran cortarlo, tendría que pagar solo la mitad.

Joe Flacco firmó en Denver por 3 años y $66.4 millones y por lesión jugó media temporada. Los Broncos parece que le darán las riendas al novato Drew Lock, así que el MVP del Super Bowl XLVII podría quedar disponible. Contrario a los anteriores, su contrato no es nada cómodo, ya que le deben $20.25M en 2020 y $24.25M en 2021. Si lo cortan, deben pagar 23.8, pero se ‘ahorran’ 27.5.

El comodín de este grupo es Nick Foles, a quien Jacksonville le dio un gran contrato antes de esta temporada, pero se lesionó en la semana 1 y cuando volvió, lo hizo tan mal que ‘El bigote’ Gardner Minshew recuperó el puesto. Foles tiene tres años de contrato más y si Jacksonville lo corta, tienen que pagarle 33.8 millones en 2020, lo que es 11 millones más que si está en el equipo en 2020 porque parte de los contratos de 2021 y 2022 están garantizados. Pareciera que la única opción que salga es vía cambio. Foles ha demostrado ser uno de los mejores suplentes de la liga, capaz de ganar en la postemporada, pero nunca ha tenido una temporada regular consistente y buena desde la de 2013.

Josh Rosen fue elegido en la posición 10 de la primera ronda del Draft de 2018 por Arizona, pero Steve Wilks duró apenas un año como head coach, lo que hizo que Kliff Kingsbury quisiera traer a ‘su jugador’ como quarterback, por lo que eligió a Kyler Murray los Cardinals cambiaron a Rosen a Miami.

Hay dos jugadores a los que les podría suceder lo mismo en 2020, ambos residentes de la NFC Este: Daniel Jones y Dwayne Haskins.

Giants y Redskins eligieron a los mariscales de Duke y Ohio State en 2019, pero los entrenadores que les eligieron fueron despedidos y podrían hacer un Kingsbury y buscar traer a ‘su’ jugador, lo que podría hacer prescindibles a Jones y Haskins, que no es que hayan tenido grandes temporadas, sobre todo Haskins.

Y también tenemos que mencionar a Rosen, que fue titular tres partidos durante el pésimo inicio de Miami, antes de que ‘Fitzmagic’ hiciera lo suyo y los Dolphins terminaran el año ganando 5 de sus últimos 9 partidos. Le quedan dos años más de su contrato de novato, con opción para el quinto, y su contrato es extremadamente barato ya que Arizona pagó la mayoría en 2018, por lo que los Dolphins solo tienen que pagarle $2 millones en 2020 y $2.9 en 2021. Pareciera que no tiene futuro a largo plazo con los Dolphins, pero el talento sigue estando ahí y quizás algún equipo le brinde la estabilidad que no tuvo ni en Arizona ni en Miami.

La llave maestra para contender en la NFL está en tener a un quarterback en su contrato de novato, ya que es una ganga a comparación de lo que ganan las estrellas veteranas de la posición. Así que varios equipos podrían preferir un joven mariscal que uno de los veteranos mencionados.

Tras el anuncio de Tua Tagovailoa de que ir al Draft, hay al menos tres que los expertos colocan en la primera ronda del Draft y otro tanto que podrían subir sus bonos.

Joe Burrow, salvo una sorpresa mayúscula o lesión, será la selección #1 por Cincinnati. Justin Herbert no fue constante en Oregon, pero en el Rose Bowl mostró cierta movilidad y tiene la potencia de brazo y altura que algunos equipos buscan. Será interesante ver si Tua cae demasiado por su lesión y qué equipo de récord no tan malo podría aprovechar esa caída, como en su momento Green Bay se hiciera con Aaron Rodgers o el mismo Baltimore con Lamar Jackson.

Las otras opciones que vienen de la NCAA son Jake Fromm, que guió tres temporadas seguidas con al menos 11 victorias para Georgia y apariciones en la final del SEC, aunque sus números cayeron seriamente en 2019 y no es el jugador más móvil, más grande ni de mejor brazo. Jacob Eason, a quien en su momento Fromm reemplazó por lesión con los Bulldogs, es el caso contrario: grandes condiciones físicas, pero poca consistencia. De ahí, Jordan Love de Utah State puede ser un prospecto interesante por su movilidad y brazo, aunque le juega en contra el no haber estado en una de las mejores conferencias. Por último, el último en la línea de producción de quarterbacks de los Sooners de Oklahoma, Jalen Hurts, que nunca fue el mariscal más preciso, pero tuvo una mejora importante al estar bajo el esquema de Lincoln Riley en 2019.

Si bien Joe Burrow tuvo una temporada histórica y pareciera tener buenas opciones de tener éxito en el siguiente nivel, hay una sombra sobre toda la generación 2020 del Draft y es Trevor Lawrence. El mariscal de Clemson es considerado el mejor prospecto en la posición desde Andrew Luck y será elegible el siguiente año, así que podríamos ver a varios equipos aguantando un poco más para buscar hacerse con sus servicios el siguiente año.

Ya hemos mencionado 19 quarterbacks que tener nuevo equipo en 2020, pero evidentemente no hay 19 equipos que estén buscando mariscal urgentemente. Hay solo dos que sí tienen vacante para la siguiente temporada y otros que puedan estar ya buscando un plan a mediano plazo.

Chargers (Philip Rivers), Patriots (Tom Brady), Saints (Drew Brees), Bucs (Jameis Winston) y Titans (Ryan Tannehill) no tienen contrato para 2020. Si bien los tres primeros podrían volver a los equipos con los que han estado más de una década, también tienen que pensar ya en un plan de sucesión, porque el más joven (o menos viejo, si prefieren) es Rivers con 38 años.

Ni Aaron Rodgers ni Ben Roethlisberger son exactamente jóvenes (36 y 37 años, respectivamente), ambos tienen un historial considerable de lesiones y al menos le Big Ben ya ha hablado antes del retiro, aunque volverá para 2020. ¿Cuántos años más les quedan en Packers Steelers? Difícil de saber, pero Ben tiene dos años más de contrato, Rodgers cuatro.

Un ‘comodín’ aquí es Detroit, ya que Matthew Stafford ha tenido fracturas de espalda los últimos dos años y eso le podría complicar su futuro con los Lions pese a solo tener 31 años.

Por último, IndianapolisEl retiro de Andrew Luck cambió todos los planes para 2019 y aunque Jacoby Brissett no lo hizo nada mal al inicio del año, bajó su rendimiento por las lesiones que sufrió él y toda su ofensiva. Brissett tiene un año más de contrato, pero difícilmente sea la opción a mediano plazo, por lo que podrían buscar un heredero más joven.

Cincinnati Miami son los dos equipos que más claro tienen la necesidad de buscar quarterback. Ambos apuntan a buscar en el Draft, aunque Miami es un comodín por tener bajo contrato a Ryan Fitzpatrick y que podrían estar pensando en 2021 y Trevor Lawrence.

Giants, Redskins, Bears, Jaguars y Browns podrían tener en mente un cambio de rumbo. Los primeros dos porque llega una nueva era con cambio de entrenador, mientras que en Chicago se quedarán un año más con Trubisky porque no tienen de otra, aunque no ha demostrado estar a la altura de ser la segunda selección global del Draft de 2017, sin mencionar que subieron para elegirle por encima de Mahomes y Watson.

Jacksonville podría tener a su mariscal del presente y del futuro con Gardner Minshew, aunque su rendimiento cayó durante la temporada hasta perder el puesto, pero el mal nivel de Nick Foles se lo regresó. Por último, Cleveland creía tener finalmente la solución a la ‘Fábrica de la Tristeza’ en Baker Mayfield, pero van por un cambio de entrenador más y aunque no cambiarán de QB para su tercer año, quizás el ganador del Heisman en 2017 no tenga futuro más allá de 2022.

Con información de Marca