FMI reduce sus espectativas de crecimiento para México

Sin Embargo

CDMX.- El Fondo Monetario Internacional redujo su pronóstico de crecimiento para México a 2.1 por ciento en 2016, desde el 2.5 por ciento que estimaba en julio pasado, mientras que para 2017 redujo su previsión a un 2.3 por ciento desde el 2.6 que preveía anteriormente. Asimismo, estima que el crecimiento del PIB global será inferior en 0.1 por ciento a lo que esperaba, para un avance del 3.1 por ciento y del 3.4 por ciento en 2017.

En su informe sobre Perspectivas de la Economía Global, el FMI atribuyó sus rebajas a los efectos que el Brexit ha causado en las economías del mundo y al lento crecimiento que ha observado Estados Unidos. Estos dos factores “han presionado a las tasas de interés” alrededor del mundo y ahora se espera una política económica “acomodaticia” que permanecerá por más tiempo.

En las economías avanzadas, el FMI apunta que los menores pronósticos de crecimiento, aunados a la incertidumbre por el contexto global podrían alimentar el descontento con la política. El organismo ve también una “mayor tracción de políticas anti-integración”, así como un periodo de ajuste a unos precios de materias primas que siguen bajos. En este sentido, existe una “presión global para adoptar políticas populistas que miran hacia adentro” de los países, dice el documento. Por ello, las economías desarrolladas sólo crecerán un 1.6 por ciento en 2016.

Para las economías emergentes la historia es un poco distinta. En general, éstas crecerán un 4.2 por ciento, el primer aumento tras años de bajas continuas. No obstante, el FMI señala que este crecimiento no se dará de manera uniforme en todos los países.
En México, la reducción en el pronóstico de crecimiento irá acompañado de una menor producción de petróleo hasta 2.1 millones de barriles diarios (mbd) al cierre del presente año, menores a los 2.5 mbd que se produjeron en 2015, y espera un ligero repunte hasta 2.3 mbd en 2017. En tanto, el promedio mundial de producción de crudo se estima en 3.1 mbd para 2016 y un aumento hasta 3.4 mbd en 2017.

La inflación en México llegará, dice el FMI, a 3.3por ciento en 2017, lo que sería su mayor nivel en dos años tras haber tocado un mínimo histórico de 2.1 por ciento en diciembre de 2015. En 2016 el pronóstico es que los precios aumenten un 2.8por ciento, mientras que la tasa de desempleo pasará de 4.4 por ciento registrado en 2015 a 4.1 por ciento en 2016 y a 3.9 por ciento en 2017. No obstante, México es uno de los países emergentes en los que el organismo liderado por Christine Lagarde espera que la inflación se mantenga dentro de los objetivos establecidos por su Banco Central, que en el caso de México es de un 3 por ciento más/menos un punto porcentual.

México contrasta con el resto de las economías emergentes respecto a su política monetaria. Mientras que el resto de los países del entorno ha relajado sus tasas de interés, en México ésta se ha incrementado en 50 puntos hasta un 4.75por ciento desde que el Brexit comenzó a ejercer presiones sobre la inflación.

El bajo crecimiento del PIB mexicano, explica, obedece al débil desempeño de las exportaciones registrado en el primer semestre del año, y será una modesta recuperación de la demanda interna lo que impulse el avance de la economía el año que viene. A mediano plazo, el FMI espera un crecimiento de 2.9por ciento del PIB, asentado en los resultados de las reformas estructurales.

Ayer, especialistas encuestados por el Banco de México (Banxico) rebajaron su estimado de PIB para 2016 a 2.13 por ciento, desde un previo de 2.16 por ciento, su cuarta baja consecutiva. Mientras que para 2017, el estimado es de 3.36, desde un previo de 2.52.

Respecto al tipo de cambio, los analistas subieron a 18.84 pesos el estimado de dólar para el cierre de año, desde la estimación previa de 18.50 pesos.

En el tema de la inflación general, los analistas la aumentaron a 3.18, desde un previo de 3.13, y para 2017 estiman que sea de 3.45, desde un previo de 3.42.

Los especialistas consultados por Banxico consideraron que los factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de México en los próximos meses son, en orden de importancia: la debilidad del mercado externo y la economía mundial (22 por ciento de las respuestas); la plataforma de producción petrolera (10 por ciento de las respuestas); el precio de exportación del petróleo (10 por ciento de las respuestas); la inestabilidad financiera internacional (8 por ciento de las respuestas); la incertidumbre cambiaria (7 por ciento de las respuestas); y los problemas de inseguridad pública (7 por ciento de las respuestas).
Además la mayoría de los especialistas ( 48 por ciento) encuestados consideraron que la evolución del clima de negocios del país en los próximo seis meses en comparación con los meses previos será peor; el 91 por ciento consideró que la situación económica del país no está mejor que hace un año; y el 45 por ciento de los especialistas dijeron que no es momento seguro para invertir.