Redacción
Un artículo publicado en la revista Science estima que las medidas de distanciamiento social (que no de confinamiento) podrían alargarse hasta el año 2022 si queremos frenar de manera efectiva la propagación del SARS-CoV-2 y la saturación sanitaria.
Dicho documento señaló que: “La experiencia de China, Italia y los Estados Unidos demuestra que la COVID-19 puede abrumar incluso las capacidades de atención médica de las naciones con recursos suficientes”. Agregó que más inversión en sanidad no implica necesariamente mejor gestión, como le ocurre, por ejemplo, a Estados Unidos.
Los autores del mismo estudio explican que si bien los países que aplicaron el distanciamiento social de manera temprana están recuperando sus actividades de manera paulatina, es necesario no tomar todo tan rápido y ser demasiado optimistas.
“Para mitigar la posibilidad de resurgimiento de la infección, pueden requerirse períodos prolongados o intermitentes de distanciamiento social. Después de la ola pandémica inicial, el SARS-CoV-2 podría seguir a su pariente genético más cercano, el SARS-CoV-1, y ser erradicado por medidas intensivas de salud pública después de causar una epidemia breve pero intensa. Pero cada vez más, las autoridades de salud pública consideran que este escenario es poco probable”.
Más adelante, los investigadores plantean que el coronavirus podría tomar un comportamiento similar al de una gripe que podría provocar un mayor número de enfermedades durante el invierno, por lo que recomienda el distanciamiento social hasta el 2022.
“Probablemente ocurrirán brotes recurrentes de SARS-CoV-2 durante el invierno después de la onda pandémica inicial más grave. Para evitar esto, el distanciamiento social prolongado o intermitente puede ser necesario hasta el año 2022”. Además, añaden: “Incluso ante el caso de una eliminación aparente del virus, la vigilancia del SARS-CoV-2 debería mantenerse, ya que un resurgimiento del contagio podría ser posible hasta 2024”.
Para hacer posible esta estrategia, los expertos señalaron que una ampliación adecuada de los servicios de atención médicos y terapéuticos podrían beneficiar a la extensión del distanciamiento social.
Con información de Muy Interesante