Redacción
EU.-Pronosticar algunas enfermedades puede ser sencillo.
El Alzheimer es una de las enfermedades más comunes en todo el mundo, convirtiéndose en el tipo más común de demencia. Según especialistas, la pérdida de memoria comienza a aparecer por primera vez a partir de los 60 años, aunque no se descartan casos en donde sea más temprana. En consecuencia, una reciente investigación determinó que un test puede pronosticar la enfermedad con años de anticipación.
La enfermedad del Alzheimer comienza con una leve pérdida de memoria que se vuelve paulatina y crece con el correr de los meses, afectando las capacidades cognitivas de la persona. Y con el correr de los años la comunidad científica ha intentado conocer sus causas, sin embargo todavía no se conoce con exactitud y se cree que puede deberse a múltiples factores, partiendo desde los genéticos y pasando por malos hábitos alimenticios.
En este contexto, una importante investigación reveló que un test de memoria podría indicar razones tempranas en la enfermedad de Alzheimer antes de que aparezcan los primeros síntomas. El ensayo estuvo integrado por 4.484 personas sin problemas cognitivos y con una edad promedio de 71 años. Durante la prueba, a los participantes se les mostraron imágenes de objetos y se les dieron pistas sobre la categoría de los artículos, como por ejemplo una imagen de uvas con la señal de fruta.
Después el test continuó pidiéndoles a los participantes que recordaran los elementos, primero por sí mismos y luego con pistas sobre la categoría de los objetos que no pudieron recordar. Los investigadores señalan que este tipo de aprendizaje controlado ayuda con los problemas leves de recuperación de la memoria que se dan en muchas personas mayores sanas, pero no tiene mucho impacto en la memoria de las personas con demencia. En consecuencia, permitirá detectar las primeras señales de Alzheimer.
Además los participantes del test fueron sometidos a exámenes cerebrales para buscar placas de beta-amiloide, como así también para medir el volumen de las áreas del cerebro asociadas con la enfermedad de Alzheimer. En consecuencia, el sistema permitió detectar la dificultad que tienen las personas para recuperar recuerdos cuando aún son capaces de crear y almacenar recuerdos en sus cerebros, algo que ocurre en etapas muy tempranas antes de que se pueda diagnosticar la pérdida de memoria.
Con información de Terra