Errores que cometes después de hacer ejercicio y están arruinando tu entrenamiento

Cultura Colectiva

CDMX.- ¿Cuánto dinero gastas para verte bien y cuánto estás dispuesto a tirar a la basura? Según una nota publicada por Forbes México en los hogares de nuestro país se gasta aproximadamente 2 mil 800 pesos mensuales en el mercado de la vanidad, el cual incluye cosméticos, productos de higiene personal, suplementos alimenticios y membresías de gimnasio. Si sumamos el monto nos encontramos que al año invertimos 33 mil 600 pesos para vernos bien, sin embargo, más del 20 % de ese dinero lo tiramos a la basura por errores que cometemos después de hacer ejercicio.

El equipo de BBC Mundo entrevistó a Juan Francisco Marco, profesor del centro de ciencia deportiva y fitness Alto Rendimiento para conocer cuáles son las acciones contradictorias para nuestro organismos. La plática inició con una asombrosa sentencia: “Un entrenamiento físico no termina cuando se deja de correr o finaliza la rutina. Sigue una etapa de estabilización de suma importancia, la cual la mayoría de los deportistas no realiza”, afirmó Francisco Marco. De aquella entrevista rescatamos los siete errores más graves y compartimos un consejo poco divulgado en el mundo del deporte.

Error 1: No estirar

Al realizar una intensa actividad el cuerpo tarda en regresar a su estado natural. Según el especialista una excelente forma de ir disminuyendo la aceleración de manera progresiva es con los estiramientos. “Es imprescindible para relajar los músculos y para estabilizar todo el sistema cardiorrespiratorio”, dijo. La forma correcta es realizar segmentos de 15 o 20 segundos siempre con movimientos suaves.

Error 2: No ducharse

Más allá de un hábito higiénico, ducharse después de hacer ejercicio beneficia al cuerpo de maneras sorprendentes. “Principalmente estimula la circulación sanguínea, congestiona la masa muscular, tonifica la piel y ayuda con la lipólisis, que es un proceso metabólico en el que se logra quemar los lípidos ya que hay un cambio de temperatura muy brusco y el cuerpo acelera el metabolismo para intentar dar calor”, cuenta Marco, quien recomienda que se haga con agua fría.

Error 3: Pasar a un estado de absoluto reposo

Para el profesor del centro de ciencia deportiva “es contraproducente un cambio tan drástico de pasar de estar muy activo a estar detenido de golpe. Es bueno mantener un mínimo de actividad para que se vaya calmando poco a poco”. Nuevamente reitera el desacelerameinto progresivo y mantener al organismo activo aunque sea con un mínimo de intensidad.

Error 4: No abrigarse

Cuando la gente siente el calor que produce el esfuerzo físico no se abriga lo suficiente o se destapa aún más. Después de hacer ejercicio el organismo se está recuperando del esfuerzo realizado quedándose vulnerable a contagios y enfermedades. El consejo es sencillo: hay que taparse.

Error 5: No hidratarse

El 75 % de los músculos están constituidos de agua. No beberla antes, durante y después del ejercicio resultaría es el error más grande que puede cometer un deportista. Cuando el desgaste es intenso hay que tomar bebidas isotónicas o rehidratantes. El profesor de fitness Alto Rendimiento hace hincapié en no confundirlas con las bebidas energéticas, las cuales reactivan el organismo cuando lo importante es normalizar los niveles fisiológicos.

Error 6: No comer después del ejercicio

Además de hidratarse, las personas necesitan recargar los depósitos de glucógenos para reponer la energía perdida y de proteínas para reparar lo antes posible las microrroturas que se producen a nivel muscular. Se puede hacer a través de batidos de proteínas, pero lo mejor es con la alimentación habitual. “Aunque en poca cantidad, ya que se trata simplemente de recargar”, aclaró Juan Francisco Marco.

 

Error 7: Fumar

Suena evidente, pero muchas personas encienden un cigarrillo al terminar una actividad física como un hábito de relajación. Si fumar es dañino, al realizarlo después del ejercicio los efectos negativos se multiplican”porque el sistema respiratorio está más abierto y todo lo tóxico que aporta el tabaco entra con más facilidad a los pulmones y el organismo”.
Comentario extra: Bebe una cerveza

Recientes investigaciones han demostrado que beber una cerveza después del ejercicio ayuda a nivelar el organismo. Al respecto Juan Antonio Corbalán, especialista en fisiología del ejercicio y exjugador de baloncesto profesiona, esta bebida “puede reponer minerales, antioxidantes, vitaminas del grupo B y aminoácidos”.

“Una cerveza es un buen recuperador –ratificó Marco– pero está claro que su consumo tiene que ser con moderación porque después de dos ya se comienzan a sentir los efectos del alcohol”.