Redacción
El ciclismo se ha convertido en una alternativa popular tanto para el transporte como para el ejercicio. Sin embargo, elegir la bicicleta adecuada es clave para garantizar comodidad y seguridad.
Especialistas recomiendan evaluar varios aspectos antes de adquirir una bicicleta, como el tipo de uso, el sistema de frenado y la talla del cuadro. “Escoger una bicicleta incorrecta puede causar lesiones musculares y afectar el control del vehículo”, advierten expertos de EnBici, taller especializado en Madrid.
Entre las principales consideraciones para una compra acertada se encuentran:
- Optar por una compra segura: Adquirir una bicicleta en un establecimiento formal garantiza autenticidad, servicio técnico y respaldo en términos de garantía.
- Evaluar el sistema de frenado: Mientras los frenos V-Brake son comunes en modelos económicos, las bicicletas de montaña o gama alta cuentan con frenos de disco hidráulico, que ofrecen mejor rendimiento en terrenos exigentes.
- Definir el tipo de uso: Para recorridos urbanos, las bicicletas plegables o urbanas son ideales, mientras que las de montaña están diseñadas para superficies accidentadas.
- Seleccionar la talla adecuada: Un cuadro mal ajustado puede provocar molestias y lesiones. Es recomendable consultar una tabla de referencia según la estatura del ciclista.
- Elegir la suspensión según el terreno: En caminos irregulares, una suspensión de aire o de resorte ayuda a absorber impactos y mejorar la experiencia de conducción.
Tipos de bicicletas según el uso
El mercado ofrece modelos diseñados para distintos terrenos y necesidades. Entre los más comunes están:
- Urbanas y plegables: Ideales para movilidad en ciudad, ligeras y compactas.
- De ruta: Diseñadas para alcanzar altas velocidades en asfalto.
- Single Speed: Bicicletas de una sola velocidad, eficientes y de bajo mantenimiento.
- De montaña: Resistentes, con llantas anchas y sistemas de cambios para adaptarse a desniveles.
- Híbridas: Versátiles, combinan características de ruta y montaña.
- BMX: Especializadas en acrobacias y maniobras.
Beneficios del ciclismo para la salud
Más allá de su funcionalidad, el ciclismo ofrece múltiples beneficios físicos y mentales. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), esta actividad ayuda a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares, diabetes y algunos tipos de cáncer.
El cardiólogo Mario Boskis señala que el ciclismo contribuye a mejorar la presión arterial, el colesterol y la regulación de la glucosa en sangre. Además, la liberación de endorfinas genera bienestar y disminuye el estrés.
Por su bajo impacto, es una alternativa accesible para personas con sobrepeso o problemas articulares. “Permite mantenerse activo sin sobrecargar las articulaciones”, explica el cardiólogo Jorge Franchella.