Científicos prueban tratamiento anti- obesidad

Redacción

España.- ¿Tienes problemas de sobrepeso? ¿Te angustian esos kilos de más? Un nuevo estudio publicado hoy en Cell Metabolism realizado por Investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y el Translation Gerontology Branch ha demostrado que la inhibición farmacológica parcial de la enzima PI3K en ratones y monos obesos reduce el peso corporal y las manifestaciones fisiológicas del síndrome metabólico, en concreto los problemas de diabetes y la esteatosis hepática (hígado demasiado graso) sin afectar al organismo, es decir, sin toxicidad ni efectos secundarios.

La enzima en cuestión (fosfatidilinositol-3-quinasa*), ayuda a regular el equilibrio entre la producción de los componentes bioquímicos de las células y el gasto de nutrientes que se produce en estas. La enzima es de gran importancia para numerosos aspectos del crecimiento y de la supervivencia celular, aunque según declaran los investigadores en la nota de prensa enviada a los medios, puede llegar a favorecer el cáncer a consecuencia de diversos factores de riesgo.

La obesidad es uno de los factores de riesgo más importantes del conjunto de enfermedades graves que constituyen el síndrome metabólico. Por esta razón, los científicos que trabajan con cáncer han estado persiguiendo desde hace mucho tiempo inhibidores farmacológicos de PI3K. Este es el caso del CNIO, donde los investigadores han desarrollado su propio inhibidor experimental al que han bautizado como CNIO-PI3Ki, el cual está siendo estudiado en combinación con otros compuestos para el tratamiento del cáncer.

Para realizar las pruebas oportunas, el equipo del CNIO administró durante cinco meses pequeñas dosis del inhibidor CNIO-PI3Ki a ratones obesos alimentados a base de una dieta muy rica en grasas. Durante los primeros 50 días, los animales obesos perdieron un 20% de su peso, estabilizando en ese punto su peso corporal. El tratamiento se mantuvo durante 5 meses, tieempo en el que los ratones mantuvieron una pérdida de peso notable, mientras seguían alimentándose de una dieta rica en grasas. Se apreció también una mejora de los síntomas fisiológicos de diabetes y esteatosis hepática. Según Elena López-Guadamillas, investigadora del CNIO: “En obesidad no se puede estar perdiendo peso constantemente, esto sería muy peligroso. Lo deseable es alterar el equilibrio entre gasto y almacenamiento de nutrientes, para conseguir un nuevo equilibrio en el que haya más gasto y menos almacenamiento”

El estudio también indica la ausencia de efectos secundarios e irreversibles sobre el metabolismo, algo que es también deseable por su posible uso futuro en seres humanos. En animales no obesos alimentados con una dieta normal, el fármaco no produjo ninguna clase de efecto, lo que es otra garantía de seguridad. “Esto pone de manifiesto que la actividad de la enzima PI3K sólo es relevante cuando hay un exceso de nutrientes, es decir, una dieta hipercalórica o grasa”.

Una vez demostrados los efectos beneficiosos de CNIO-PI3Ki sobre ratones y monos con obesidad, el siguiente paso es el estudio con seres humanos, “algo más complejo, caro y lleno de incertidumbres”. La investigación ha sido financiada por el Ministerio de Economía y Competitividad, la Unión Europea, el Consejo Europeo de Investigación (ERC), la Comunidad Autónoma de Madrid, la Fundación Botín y el Banco Santander a través de su División Global Santander Universidades, la Fundación Ramón Areces y la Fundación AXA.