Así es el idioma únicamente silbado que se sigue utilizando en las Islas Canarias

Redacción

Entre montañas y escarpados surgió hace siglos el silbo de La Gomera, que hoy es un lenguaje fonológico perfectamente descodificado, orgullo de la isla en que se practica y Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad desde 2009.

Este sistema de comunicación por medio de silbidos —que sirvió a pastores y habitantes de La Gomera, la más pequeña de las islas Canarias, actualmente compuesta por unos 22000 habitantes— se transmite de generación en generación y desde que en 1999 el gobierno local decidiera que se impartiría como una asignatura más tomó fuerza y hoy está perfectamente garantizada su permanencia.

La clave de la vigencia del silbo gomero no solo está en que recoge esa vieja tradición y sobrevivencia de los habitantes de la isla, sino que su acierto consistió en que el lenguaje silbado entrara a formar parte de la formación de los niños y jóvenes en las escuelas y colegios.

Después vino su declaratoria de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, pero el primer gran paso se dio cuando lograron sistematizarlo para que los infantes lo aprendieran como una asignatura más.

El silbo gomero sustituye con seis fonemas, a saber dos vocales y cuatro consonantes, al alfabeto español. Como trabaja de esta manera, hay palabras que se silban de igual forma, por lo que el contexto resulta crucial para quienes se están intercambiado mensajes.

El gobierno de las islas Canarias, así describe lo que representa este conjunto de sonidos que se transforman en un código manejado en la isla, aunque no por todos los habitantes, por la complejidad y porque hubo un período en que solo se daba una transmisión azarosa y no sistematizada como sucede en la actualidad.

La atracción del silbo ha hecho que incluso ya exista una app para quienes deseen aprender algunos sonidos que traducen términos y palabras.

La aplicación se denomina “Flamingo Silbo” y por medio de ella quien desee experimentar con algunos sonidos puede hacerlo para decir, por ejemplo, hola; salud; buenos días, la cuenta, por favor; de nada; buenas noches; quiero una cerveza, por favor; ¿cómo estás?; diez; café y me puedes ayudar”.

Con información de Semanario Universidad