Arqueólogos encuentran “iPhone” en tumba de más de 2 mil 100 años

Redacción

¿Un iPhone de 2,100 años fue encontrado en Rusia? Eso fue lo que dijeron los arqueólogos que se encontraban investigando la llamada “Atlantis Rusa”, aunque no es exactamente lo que parece.

La historia del iPhone de 2,100 años

El descubrimiento fue realizado por un grupo de arqueólogos que se encontraban trabajando en Siberia. Ahí, se toparon con una tumba de alrededor de 2,137 años de antigüedad, donde encontraron un objeto rectangular que los sorprendió debido a que se veía muy parecido a los teléfonos de Apple.

El objeto fue encontrado junto con el cuerpo de una mujer joven, después de que una reserva siberiana se secara por las altas temperaturas del verano en 2019, en un lugar que, al estar cubierto por el agua, fue bautizado como la Altantis Rusa.

La mujer que tenía el “iPhone” recibió el nombre de Natasha y se cree que vivió durante el período Xiongnu en la antigua Mongolia durante el siglo III a. C. Al dar con su tumba, los arqueólogos desenterraron un gran objeto rectangular que, según ellos, se parece mucho a un teléfono inteligente, pero en realidad está formado por azabache negra, lo que le da la apariencia del iPhone, incrustado con pequeñas piedras preciosas y joyas que también se asemejan a las fundas que se usan para protegerlos y personalizarlos.

El arqueólogo Dr. Pavel Leus dijo: “El entierro de Natasha con un iPhone de la era Hunnu (Xiongnu) sigue siendo uno de los más interesantes en este lugar de entierro. Se cree que la mujer antigua solía usar la pieza como una hebilla de cinturón, lo que, de ser cierto, la convierte en una pieza increíble. El suyo era el único cinturón decorado con monedas wuzhu chinas que nos ayudó a fecharlo”.

Tristemente el objeto no es un iPhone y tampoco una prueba de que los humanos ya han logrado viajar en el tiempo (aunque para eso está la misteriosa foto de Greta Thunberg en el pasado o el parecido de Keanu Reeves con otras figuras históricas), pero sin duda confirma que el interés de los humanos por la moda comenzó hace mucho, mucho tiempo, y usar accesorios no es exclusivo de la era moderna (y el descubrimiento solo se pudo hacer gracias a que la zona sumergida bajo el agua se seca por unos meses cada año).

La Dra. Marina Kilunovskaya del Instituto de Cultura de Historia Material de San Petersburgo, quien dirige la Expedición Arqueológica de Tuva, dijo: “Este sitio es una sensación científica. Somos increíblemente afortunados de haber encontrado estos entierros de ricos nómadas hunos que no fueron molestados por (antiguos) ladrones de tumbas”.

Con información de GG