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Cd. de México.- Aguascalientes y Zacatecas sufren la carencia del combustible.
Estas entidades se alimentan de gasolinas a través del ducto Tula-Salamanca-Aguascalientes, el cual deja de operar cada vez que Pemex debe repararlo por las tomas clandestinas.
José Ángel García Elizondo, presidente nacional de la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo), dijo que en Aguascalientes hay una terminal de almacenamiento y reparto que tiene una capacidad pequeña para almacenar gasolinas y diesel.
Estos combustibles se agotan pronto al abastecer la demanda de los dos Estados, expuso.
A la par de este problema, en las entidades se resintió la falla en el sistema de facturación de Petróleos Mexicanos (Pemex), que afectó las operaciones en todo el País y sigue causando estragos en el Bajío.
Tal es el caso de Jalisco, donde aún no se regulariza la entrega de gasolina Premium ni de Diesel.
La semana pasada, este mismo factor generó cuellos de botella en los fletes de combustible que debían abastecer a Nuevo León, Coahuila y algunas partes de Tamaulipas.
No obstante, Pemex negó que se hubieran dado fallas en el sistema de facturación y de solicitud de fletes de combustible.
Sin embargo, reconoció que se llevó a cabo una actualización programada a la infraestructura y se activaron procedimientos para mantener la operación continua.
Este sistema tuvo un control de pruebas y simulacros para comprobar su operación.
Además, dijo que los fletes mantuvieron su operación de acuerdo con los procedimientos establecidos.
García Elizondo aseguró que las fallas en el sistema obligaron incluso a que las solicitudes de fletes se llenaran a mano en un proceso más tardado.
“Pemex cambió su sistema electrónico de solicitud de compras de combustibles y facturación. Al momento de cambiarlo, quisieron volver al sistema anterior, no se pudo, y durante varios días se hizo el pedido de forma manual. Esto dio un retraso en el suministro”, dijo.
Pablo González, presidente de la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas), expresó por separado que el sector no percibe una reducción en la venta ilegal de combustibles.
Ambos representantes criticaron que la estrategia de Pemex para transportar gasolinas en bruto a través de ductos no se refleja en una precepción menor del comercio ilegal de combustibles.