Redacción
Por lo menos un 14% de los voluntarios de la vacuna rusa contra el coronavirus, llamada Sputnik-V, mostraron efectos secundarios como fiebre y dolores musculares.
Esto representa a 300 personas que forman parte de este ensayo clínico, informó el ministro de Sanidad ruso, Mijail Murashko.
“Fueron vacunadas más de 300 personas. Un 14 por ciento de ellos tienen quejas menores de debilidad, dolores musculares menores durante el día y alguna vez tienen fiebre”.
El ministro aseguró que este resultado ya estaba previsto, por lo que no es una sorpresa para los investigadores.
Según los desarrolladores, la vacuna rusa ha demostrado una inmunogenicidad estable y protegerá contra el nuevo coronavirus por un plazo de hasta dos años.
Hace una semana, la Universidad de Oxford y Astrazeneca tuvieron que detener los ensayos clínicos de su vacuna contra el coronavirus, sin embargo, ya reanudaron sus actividades.
Con información de Antena 3