Inician funerales de Estado para el expresidente George H.W. Bush

Diario de Yucatán

Washington.- El presidente estadounidense, Donald Trump, y su esposa Melania acudieron esta noche al Capitolio para rendir sus respetos ante el féretro con los restos del expresidente George H.W. Bush, llevados a esta capital para recibir funerales de Estado.

Ceremonia política

La brevísima presencia de la pareja presidencial se registró horas después de la ceremonia en la que la clase política rindió tributo al cuadragésimo primer presidente de Estados Unidos, quien falleció el pasado viernes en su casa de Houston, Texas, a los 94 años.

Trump y su esposa se retiraron del lugar después de permanecer menos de un minuto ante el féretro, cubierto con la bandera estadounidense y resguardado por cuatro miembros de la fuerzas armadas que montaban guardia.

El féretro con los restos de exmandatario arribó a la capital, procedente de Houston, a bordo del avión presidencial, facilitado por Trump para la ocasión, en el que viajaron también los cinco hijos, incluyendo el expresidente George W. Bush, así como nietos y algunos bisnietos del exmandataro.

Homenajean al ex mandatario

La aeronave arribó a la sede de la fuerza aérea conjunta Andrews en Maryland,bajo un radiante sol en una tarde fría.

Al bajar 21 salvas saludaron al féretro y lo colocaron en una carroza fúnebre para su traslado al Congreso, escoltada por una procesión de vehículos oficiales y policíacos.

A su llegada al Capitolio, colocaron el féretro en la Rotonda, que divide al Senado y la Cámara de Representantes, donde permanecerá expuesto hasta la mañana del miércoles, a fin de permitir que el público le rinda sus respetos.

Los líderes del Senado, Mitch McConnell, y de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, además del vicepresidente, Mike Pence, pronunciaron breves discursos en los que destacaron los aportes políticos de Bush, pero sobre todo su don de gente y su trato humano.

Luto nacional

El miércoles, día de luto nacional declarado por Trump, llevarán el féretro será a la Catedral Nacional para un servicio religioso, al que asistirán también el presidente y su esposa.

Luego, transportarán el cuerpo en avión de regreso a Houston y lo llevarán a la Iglesia Episcopal San Martin para otro servicio religioso con familiares y amigos, previsto para el jueves.

Finalmente, colocarán el féretro en un tren que lo llevará hasta la comunidad de College Station, a la Universidad de Texas A&M, 144 kilómetros al noroeste de Houston, hacia la biblioteca presidencial que lleva su nombre, y donde será enterrado al lado de su esposa Bárbara.