En agosto inflación más alta en los últimos 16 años, influyó el gasolinazo

La Jornada

Ciudad de México.- La inflación en agosto, medida mediante el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), registró un aumento de 6.66 por ciento en términos anualizados, la mayor en los pasados 16 años derivado del alza en los precios de los productos agropecuarios y la liberalización en los precios de los combustibles, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

El índice inflacionario se compara desfavorablemente con los registrados en el mismo periodo de 2016, cuando se llegó a inflación de 0.28 por ciento mensual y de 2.73 por ciento anual.

El gobernador del Banco de México (BdeM), Agustín Carstens, aseguró que la inflación ya alcanzó su techo y a partir de ahora empezará a descender para que el próximo año se acerque a la meta de 3 por ciento anual fijada por el instituto central.

Entrevistado después de la inauguración del tercer Foro Internacional de Inclusión Financiera, Carstens aseveró: estamos teniendo una burbuja en la inflación por factores muy puntuales, pero estoy seguro de que el año entrante la inflación estará convergiendo a 3 por ciento, como es la meta del Banco de México.

Explicó que la inflación se disparó por factores muy particulares, parte por el movimiento cambiario que así ha respondido a factores externos y por complementar una reforma estructural que va a dar grandes beneficios al país, como la reforma energética y también porque en algunos lugares ha llovido demasiado y en otros no; entonces por eso los productos agropecuarios han subido”.

El gobernador del Banco de México dijo: Nosotros confiamos en que ya estamos prácticamente en el techo y de aquí debería empezar a bajar la inflación, y advirtió que los huracanes son efectos temporales que podrían afectar los precios.

La inflación en México no había alcanzado los actuales niveles de 6.66 por ciento desde mayo de 2001, cuando se ubicó en 6.95 por ciento

Como parte de sus esfuerzos para contener el alza sostenida de los precios, el banco central subió siete veces consecutivas la tasa de interés referencial desde septiembre de 2016, en un ciclo alcista que finalizó el mes pasado con su decisión de mantenerla en 7 por ciento.

La variación mensual del índice de precios subyacente, considerado un mejor parámetro para medir la trayectoria de los precios porque elimina artículos de alta volatilidad, fue de 0.25 por ciento y anual de 5 por ciento; por su parte, el índice de precios no subyacente registró alza de 1.22 por ciento mensual y una tasa anual de 11.98 por ciento.

Cebolla y tomate verde, los que más subieron de precio

Al interior del índice de precios subyacente, el subíndice de las mercancías creció 0.47 por ciento y el de los servicios de 0.06 por ciento mensual.

Dentro del índice de precios no subyacente, los precios de los productos agropecuarios subieron 2.06 por ciento y los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno 0.67 por ciento mensual.

En agosto de 2017 los productos con mayores alzas de precios fueron: cebolla, con 54.58 por ciento; tomate verde, 15.69; papa y otros tubérculos, 8.93, y jitomate con 8.35 por ciento. Estas alzas fueron parcialmente compensadas con las caídas en los precios del chayote con (-) 26.62 por ciento; transporte aéreo (-) 19.36 y servicios turísticos en paquete con 9.77 por ciento.

Las principales localidades con mayores alzas de precios fueron Chetumal, Quintana Roo, con 1.42 por ciento mensual; Tapachula, Chiapas, 1.29, y Tehuantepc, Oaxaca, con 1.22 por ciento.

En contraste las ciudades con menores alzas de precios correspondieron a: Tepatitlán, Jalisco, con 0.00 por ciento; Tijuana, Baja California, 0.05, y Tepic, Nayarit, con 0.09 por ciento.